¿En qué consiste la sostenibilidad y el desarrollo sostenible?

Hace ya unos años que la sostenibilidad entró en nuestras vidas para quedarse, y a día de hoy ya no es un valor añadido que una empresa implemente prácticas sostenibles en su cadena de valor; ya son medidas necesarias que se deben integrar en cualquier tipo de empresa para que pueda ser aceptada ampliamente por el colectivo de los consumidores. No obstante, para muchos los términos sostenibilidad y desarrollo sostenible son todavía una incógnita. En las siguientes líneas te contamos en qué consisten estos dos conceptos y realizamos un recorrido por los hitos más importantes de la historia de la sostenibilidad.

Desarrollo Sostenible 

El desarrollo sostenible es la idea de que las sociedades deben vivir y satisfacer sus necesidades sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras de satisfacer las suyas. La definición oficial se publicó en el informe Brundtland en 1987.

Esta definición de desarrollo sostenible trae consigo una serie de pautas de comportamiento tanto en el momento presente como en el futuro, como la preservación del medio ambiente y los recursos naturales y demás medidas relacionadas con los tres pilares de la sostenibilidad: medioambiental, económico y social.

El desarrollo sostenible comenzó a tener relevancia en la segunda mitad del siglo XIX, cuando en la revolución industrial las economías desarrolladas comenzaron a preocuparse por las consecuencias medioambientales de la producción desmedida consecuencia de ese boom de la industria. Comenzaron a aparecer las primeras crisis medioambientales y el bienestar social se vio perjudicado, y se hizo evidente la necesidad de un modelo de producción más sostenible.

 La Tragedia de los Comunes y el Desarrollo Sostenible (1968) 

En 1968, el ecologista y filósofo Garret Hardin escribió un ensayo titulado La Tragedia de los Comunes. Trató el hecho de que, si las personas actuaran de manera independiente, racionalmente y centradas en conseguir sus intereses individuales, terminarían yendo en contra de los intereses comunes de sus respectivas comunidades y agotarían los recursos naturales del planeta. Unos años más tarde, en 1980 se creó el Índice de Desarrollo Humano, que se utiliza actualmente como herramienta estadística para medir la consecución de objetivos de los países en materia económica y social. Para conseguirlo, se tienen en cuenta factores como la salud, la educación, las finanzas, la seguridad y la movilidad, entre otros. Cada año, el Programa de Desarrollo de Naciones Unidas hace un ranking y sirve para tener una idea de los niveles de desarrollo entre países.

El Informe Brundtland y el Desarrollo Sostenible (1997)

El informe Brundtland, también conocido como Nuestro Futuro Común, realizado por La Comisión Mundial del Medio Ambiente y del Desarrollo (CMMAD ofreció la definición mayormente reconocida de lo que conocemos como desarrollo sostenible, y es el desarrollo que satisface las necesidades de la generación presente, sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras de satisfacer sus propias necesidades.

Los Objetivos de Desarrollo Sostenible

Como ampliación de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) y para alcanzar aquellos objetivos que no se cumplieron, en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo, celebrada en Río de Janeiro en el año 2012, se idearon los Objetivos de Desarrollo Sostenible. La idea que giraba en torno a estos Objetivos era que todos los países se comprometieran a promover la prosperidad y a proteger el medioambiente a nivel global. Cada uno de estos objetivos tiene fijados indicadores específicos para evaluar su progreso, y para el año 2030 deberán estar alcanzados. Tres años más tarde, en el año 2015, varios jefes de Estado y de Gobierno de 193 países que forman parte de Naciones Unidas, se reunieron en la Cumbre de Desarrollo Sostenible. En esta Cumbre se elaboró la Agenda 2030 que señala 3 dimensiones del desarrollo sostenible: económica, social y ambiental y que contextualizaba los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Desarrollo sostenible y sostenibilidad 

Estos dos conceptos, aunque parecidos a simple vista, son diferentes y no deben confundirse. La sostenibilidad es la principal meta del desarrollo sostenible, que tiene como principal objetivo alcanzar una calidad de vida óptima para todas las personas, respetando el medio ambiente sin abusar de los recursos limitados que nos ofrece el planeta.

Nosotros como ciudadanos del mundo debemos entender e interiorizar que vivimos en un planeta interconectado, que nuestras acciones afectan a otras personas y que las decisiones que tomamos hoy, para bien o para mal, repercutirán sobre nuestros hijos el día de mañana. Aún estamos a tiempo, pero cada minuto cuenta, ¡no hay tiempo que perder!